Cientos de simpatizantes oficialistas se congregaban este martes en distintas ceremonias religiosas para pedir por la salud del presidente Hugo Chávez, que era operado en Cuba contra la recurrencia de un cáncer.
En Caracas, Miriam Escobar se detuvo con su hija en la misa que se oficiaba en una calle del centro para “orar por nuestro comandante”, en uno de los actos de este tipo a los que se convocó en varios ciudades del país.
“Sabemos que con la fe va a salir adelante”, dijo llorosa a la AFP esta estilista de 30 años.
“Chávez todavía no terminó su misión aquí en la Tierra (...) Algún día se irá pero no queremos que se vaya”, afirmó Maricela, una repostera “orgullosamente chavista”, al final de esta ceremonia.
Este acto, convocado por el ministerio de la Mujer y con fuerte presencia femenina, era replicado en otras zonas de Venezuela, atendiendo el llamado de gobernaciones o formaciones afines al oficialismo.
En Falcón (noroeste), seguidores del mandatario venezolano marcharon en pereginación y celebraron una misa en los Médanos de Coro, emulando la ceremonia de Las Ánimas de Guasare, a las que el folklore local les atribuye el cumplimiento de peticiones.
“Nos hemos unido en una sola religión: el amor que el presidente le ha profesado a los más vulnerables”, expresó la gobernadora oficialista de Falcón, Stella Lugo, según la agencia oficial AVN.
Las oraciones por la salud de Chávez se escucharon también en el santuario del “venerable” José Gregorio Hernández en el estado de Trujillo (oeste).
A este médico del siglo XX, en proceso de beatificación, se le atribuyen milagros de sanación.
Igualmente, la organización Clase Media en Positivo, afín al gobierno, realizó cadenas de oración y misas en casi todos los estados del país sudamericano.
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